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Un colega terapeuta me explicaba a modo de anécdota la "justificación" de una de sus clientes ante la situación que vivía en sus relaciones. Llevaba varios años sin hablarse con su familia. Al poco tiempo, las amistades se distanciaron ya que " todos se pelean conmigo y no me entienden". Según mi amigo, la "excusa" para esa situación era un karma familiar, con todo tipo de contras, malas intenciones, maleficios, etc. Obviamente, ese supuesto karma era un muro de acero infranqueable, el cual no podía atravesar impidiéndole hacer cualquier cosa, porque...

"Es un karma y nada se puede hacer. Solo aguantar y pedir que no vuelva a esta vida y "me toque" lo mismo". Por favor, seamos serios. Que la vida no es un juego de azar. Que esto no es una lotería donde tienes buena o mala suerte. A ver si a estas alturas todavía creen que hay un señor en el cielo con barba y cabello blanco lanzando los dados para premiarnos o castigarnos. No. Todo esto es mucho más...

Mi amigo y yo, muy divertidos, llegamos a la conclusión de que hay "espirituales" que buscan la "excusa perfecta" en unas filosofías superficiales y mal aplicadas con la única finalidad de no afrontar responsabilidades y "lavar" sus penurias con mentiras que justifiquen sus conductas.

Top ten de las mentiras espirituales:

1- " No hay solución, es un karma".

Es el número uno de los hits parade de mentiras espirituales para no hacer nada.

Esta excusa es la más utilizada por aquellos que no quieren afrontar la realidad y salir de su zona de confort.

El Karma es el juez de nuestros actos, es la energía transcendente e invisible que se deriva de nuestros comportamientos y que va acumulando consecuencias y pagos conforme a ellos.

El Karma simplemente nos dice que fuerza pusimos en movimiento hace diez minutos o hace diez vidas y aquella que volverá a nosotros.

Y el karma es para entenderlo, superarlo, integrarlo y trascenderlo. Además, del mas " voluntario que regreso de nuevo a esta vida para ayudar" a cualquier ser que habite en la tierra, todos, absolutamente todos, venimos con memorias ancestrales de lo aprendido y superado (Dharma) y de lo que debemos aprender y superar ( Karma).

Y desde nuestro nacimiento en esta vida hemos de comprometernos a aplicar lo antiguo para nuestro gozo existencial.

2- "Es mi alma gemela".

Esta es la justificación perfecta para evitar el compromiso de pareja. Además, si a mi consorte lo conozco de "otras reencarnaciones", mucho mejor.

El buscar "mi alma gemela" me da un amplio abanico de promiscuidad; coger y dejar "parejas" sin llegar a la profundidad de la propia relación.

Muchas parejas se han roto escudándose en que habían encontrado la esperada alma gemela.

Alrededor del alma gemela hay una "extraña" creencia de que todo debe ser perfecto; el conocerse, los encuentros, intimidad, el físico etc, etc. Vaya, que debe ser el ideal en todos los sentidos.

Desgraciadamente, la realidad es muy diferente, y claro que existe el alma gemela, pero tiene muy poco que ver con fantasías infantiles e inmaduras.

3- "Pido la voluntad, aportación, intercambio, ayni...".

Tan difícil es decir que se cobra por un curso, taller, consulta, etc.? Tan complicado es poner una tarifa por un servicio?

Tan escabroso es ganarse la vida con un trabajo que tiene que ver con espiritualidad? Parece que pronunciar la palabra "dinero" está prohibida por algunos colectivos místicos y se utilizan todo tipo de eufemismos para evitarla.

Curiosamente, el dinero existe y es necesario para conseguir cosas. Es una energía con la que debemos convivir nos guste o no y por tanto, a mi entender, con la que debemos tener una buena sintonía. Por un momento imagino a una persona con su carro en el supermercado lleno de verduras, frutas, productos de limpieza...

De todo lo que necesita para abastecer a su familia. Llega a la caja, pasa por la cinta, la señorita va sumando cada producto hasta llegar al último. "Son 87€. " Y entonces la cliente le dice: "bien, te hago un masaje y así estamos con un buen ayni".

4- "Yo dejo que todo fluya".

Fluir es sinónimo de "no tener que hacer nada para comprometerme, buscar, decidir, rebatir, defender, etc.". Fluir y no tener ningún tipo de postura, "por que fluyó y me dejo llevar".

En la actualidad es una grave enfermedad espiritual cuyo fondo es la comodidad de no posicionarse, de no "mojarse" en nada. Detrás de una apariencia de esnobismo hay una persona insegura con un halo de misterio dispuesta a no hacer nada por sus homólogos y mucho menos por el planeta.

Obviamente, debemos fluir, improvisar, flexibilizar, pero con dirección y objetivo.

5- "No trabajo, contribuyó a un mundo mejor".

El que no trabaja tiene detrás un respaldo; lo mantiene papa o una pareja, o vive de rentas, o le toco una herencia o es un parasito que saca lo que puede a los demás. El "mana" no cae del cielo.

La gran mayoría de las personas que participan de todos los "saraos" espirituales gratuitos; manifestaciones, cooperativas, ayudas desinteresadas, etc, no viven del aire, aunque den una apariencia de no necesitar nada.

Estos personajes pueden ser muy peligrosos, rozando la psicopatía ególatra en pro de su único beneficio; ser cigarra, cantar toda la vida holgazaneando y "chupar" lo que puedan a una cándida hormiga.

Se identifican por que hablan muy mal del sistema, el dinero y la sociedad aunque viven muy bien en su mundo apoyado por fieles admiradores.

6-"Sublimo la pareja con el tantra".

Hace años, un conocido me dijo alegremente: "yo de tantra nada, a mí lo que me va es practicar "tentra". Te entra bien o no?".

Confieso que en su momento me sentí molesta por la frivolidad pero ahora me hace mucha gracia.

El humor es fundamental en estos lindes espirituales empezando por reírse de uno mismo. Un ejercicio muy sano.

Tantra no es sinónimo de promiscuidad, libertinaje, infidelidades, sometimiento, abuso de poder, etc.

Que las sombras de Grey pertenecen al celuloide. Cada cual decide y hace lo que le place con su vida y sexualidad, pero que se utilicen tradiciones esotéricas milenarias orientales para profanar y embaucar en lugar de desarrollar el espíritu hace que se pierda el sentido sacralizado de las formas.

No todo es correcto ni todo está permitido a menos que el individuo en "plenas facultades" esté de acuerdo. Es tan denigrante manipular a personas que buscan ayuda para favorecerse uno mismo.

Desgraciadamente esos "brujos" utilizan el poder de la energía sexual en su propio beneficio en lugar de acompañar a otros en el camino de la auto realización.

7- "Canalizo, pero no entiendo porque me mienten y no sale nada de lo que me dicen".

La respuesta es sencilla. No se cumple ningún pronóstico por qué no canalizan nada, solo el propio diálogo interno mental.

Es muy fácil diferenciar a una persona conectada ("canalizado") de un paranoico ególatra; el primero observa, calla, no interfiere en nada, ya que es sabedor de la importancia del libre albedrío de cada individuo, y sobre todo, no necesita "solucionar" la vida a nadie.

La importancia personal, necesidad de demostrar, imposición de voluntad y criterio son algunas características de falsos canalizadores, los cuales están poseídos por energías intrusas que los manipulan y distorsionan.

Estas personas ignoran completamente la dramática situación ya que carecen de una base sólida.

La canalización es una forma de comunicación entre humanos y otros seres, usualmente de las dimensiones altas.

Estos seres pueden ser seres angelicales, de naturaleza espiritual, espíritus de seres queridos que han partido, entidades extraterrestres, o aún de animales y mascotas. Un canalizador es similar a un traductor o intérprete.

Ellos permiten a sus cuerpos sentir o percibir la comunicación proveniente de otro ser.

8- "Lo he visto por internet, hice un taller, me lo dijeron en una canalizaron... Lo sé todo."

Estamos en un momento donde las comunicaciones son instantáneas, la información prolifera por las numerosas redes sociales, todo lo que necesitamos saber llega en segundos.

Recopilamos datos, experiencias y conclusiones de otros que hacemos nuestras sin experimentar nuestra propia experiencia, vivencia, sentir....

Las prisas no permiten profundizar y entrar más allá de lo aparente con lo cual nos convertimos en "archivos humanos" de datos sin conectar con nuestra sabiduría personal y universal.

Obviamente, lo sabemos todo. Sí, pero superficialmente. Y como saber que estoy en esa tesitura? Es muy fácil, por la capacidad de bienestar, paz, aceptación y sobre todo, humildad y humanidad. Si estás ahí, es un buen camino.

No por hacer muchos talleres, cursos y consultas en internet sabremos mas, Todo lo contrario, tanta información puede distraer, colapsar y paralizar la vida de una persona convirtiéndola en una marioneta del sistema espiritual. Hay toda un corriente de apariencia "espiritual" que lo único que pretende es estancar a la población detrás del consumismo exacerbado de todo tipo de tallercitos de creci- miento personal. No todo lo bueno tiene una piel de cordero ni lo malo un astuto zorro.

9- "Estoy en proceso, ya cambiara todo..."

Según la Wiki pedía, proceso es un conjunto de actividades mutuamente relacionadas o que al interactuar juntas en los elementos de entrada los convierten en resultados.

Cuando una persona está en proceso entendemos que está llevando a cabo un programa terapéutico para esclarecer aquello que provocó una desarmonía y le impulso a salir de su zona de confort.

Ambos caminos, catarsis y armonización, deben llevar a la persona al entendimiento, integración y trascendencia del episodio perturbador.

Y no todos están dispuestos a cambiar ni mucho menos a adentrarse en territorios inhóspitos.

No todo el mundo cambia. No todo el mundo debe cambiar. No todos quieren. No todos están obligados.

Por tanto, lo que si debemos es aceptar tal y como es aquel que tenemos junto a nosotros.

Y el que quiere cambiar que cambie, hay muchas herramientas para poder hacerlo.

10- "Si mi "maestro" no me da el permiso, no puedo hacer nada".

Proliferan como setas, falsos gurús que obligan a sus subordinados a seguir unas doctrinas caducas.

La pasada era de piscis estuvo acompañada de grandes líderes que nos enseñaron a crecer a todos los niveles; Jesús, Buda, Mahoma, etc. Proclamaron un mensaje común; el amor incondicional. Han pasado milenios, muchos se convirtieron en adultos, pero todavía hay "niños" con ansias de descubrir y saber que deben ser cuidados.

Este es el prototipo buscado por los mercaderes de la espiritualidad, una especie desalmada que solo desea obtener reconocimiento, fama y poder.

Todo lo que obliga, coarta la libertad personal y te aparta del propio camino de auto realización. Lo que provoca miedo e inquietud te separa de la autentica naturaleza de amor, paz y quietud.

Ana Hatun Sonqo